
Un croissant de queso es un panecillo hojaldrado y dorado, relleno con queso derretido, que combina una textura crujiente por fuera con un interior suave y sabroso.
Un croissant de queso es un panecillo hojaldrado y dorado, relleno con queso derretido, que combina una textura crujiente por fuera con un interior suave y sabroso.